Derecho al aborto: Sincero, lo que se dice sincero, no.

Ya sé que algunos me van a decir "al menos el tipo es sincero"... Gracias por nada, Aníbal.
No solo no se trata de sinceridad, sino que decir esto hoy (después de besar todos los anillos del Papa, callando incluso a lxs opositorxs K) solo está al servicio de tapar que el kirchnerismo siempre bloqueó la discusión sobre el derecho al aborto durante todos los años que tuvo mayoría parlamentaria para hacer y deshacer a gusto, y que CFK ha prometido ante todos los estamentos de la Iglesia que mientras ella gobernara la Argentina, no se avanzaría en el derecho de las mujeres a interrumpir el embarazo. Y para empeorar todo, responsabiliza por esto a una abstracción llamada "clima social"...
Cuando sus votos sobraban, no hicieron nada. Cuando sus votos decidían, hicieron algo: boicotearon, bloquearon y CFK llegó a usar su autoridad para imponer la disciplina en el  bloque parlamentario.
Hoy muchas de nuestras amigas progres K, con quienes compartimos más de una marcha, lucha y discusión, se desalientan porque ven "imposible", como Aníbal, que se discuta el aborto.
Nosotras, que peleamos por conquistar el derecho al aborto de la única forma sensata y realista (en las calles, con un movimiento independiente del gobierno, la Iglesia y los partidos patronales), no estamos desalentadas; estamos preparadas para pelear por este derecho básico y elemental y por todos nuestros derechos. Y esperamos encontrarnos con muchas de las que ayer nos miraron con desconfianza cuando denunciábamos el silencio K, con quienes tenemos diferentes visiones de cómo podían avanzar nuestros derechos durante el gobierno de CFK, con todos/as ellos/as.
También, en la lucha por conquistar nuestros derechos, esperamos sumar a nuestros compañeros trabajadores, estudiantes, a las internas combativas, los centros de estudiantes de izquierda, a la juventud y a todas las mujeres, a las que están a favor, a las que hoy no están personalmente de acuerdo, a quienes a abortaron, a quienes nunca lo harían, pero con quienes compartimos el objetivo de impedir que sigan muriendo mujeres por abortos clandestinos.
La "sinceridad" de Aníbal sigue estando al servicio de la clandestinidad más cruel, que mata a las jóvenes, a las pobres y a las trabajadoras.
Nuestra convicción y nuestra lucha por un movimiento de mujeres independiente del gobierno, la Iglesia y los partidos patronales, está al servicio de conquistar para las mujeres los derechos democráticos más elementales, empezando por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.