26/7/11

Desestabilizadores y traidores: un clásico egipcio

(foto de 3arabwy)

El Consejo Supremo de las FFAA que gobierna Egipto en esta suerte de "transición" (ya ni vale la pena llamarla democrática) arremetió con epítetos clásicos de la era Mubarak contra la marcha que llegó el sábado al Ministerio del Interior en el barrio Abbassiya de El Cairo.

La marcha de 20.000 (aunque también dicen 50.000) personas exigía -una vez más- que se juzguen ya a los responsables del asesinato de casi 1.000 personas durante los levantamientos de enero-febrero de 2011, que terminaron con la dictadura de 30 años de Hosni Mubarak. Mientras sigue la espera por justicia para las familias de los mártires del proceso revolucionario egipcio, se mantienen los juicios a activistas y periodistas en tribunales militares, continúan las torturas, la prohibición de las huelgas y se mantiene el estado de emergencia.

La urgencia de las movilizaciones y el hastío de cada vez más sectores de la población alimentan nuevas protestas, choques con la policía y -cuando amerita, como la huelga de Suez- con el Ejército. En Suez y en Alejandría se mantienen las marchas contra la corrupción y la impunidad policial, la juventud sigue en estado de alerta contra las torturas y los funcionarios de la ex policia secreta (reciclada en nueva fuerza de seguridad), los trabajadores siguen impulsando huelgas y protestas... Las consignas siguen vigentes y mientras siga en pie gran parte del tejido institucional de la era Mubarak seguirán alimentando el proceso revolucionario (que continúa aunque haya sido canalizado en la transición liderada por el CSFA).

Volviendo a las marchas del sábado. El Consejo esperó a los manifestantes y preparó una emboscada para que los matones y la policía hagan su trabajo. La polarización que genera la impaciencia obrera y popular y la desesperación ante una situación económica que no mejora en medio del "caos" (como llaman los diarios, el CSFA y varios partidos del y que-quieren-ser-parte-del régimen) ya generó algunos choques con bandas "híbridas", que combinan ex mano de obra de la policía secreta y sectores pro-Mubarak y partidarios del CSFA.

La represión y emboscada del sábado dejó 1.000 heridos, que los mismos manifestantes llevaban a pie a los hospitales de la zona, y nuevos problemas para el CSFA. El vocero del Consejo acusó al Movimiento 6 de Abril y a Kebaya de tener un plan "sospechoso" para desestabilizar Egipto. Las organizaciones respondieron con la denuncia de que el CSFA generó los hechos de violencia y amenaza con iniciar una demanda contra el gobierno. Sólo falta que juzguen por violar el estado de emergencia a los referentes de esos movimiento y estaríamos en la era Mubarak como si nada hubiera pasado (algo que no pueden hacer hoy impunemente los militares a pesar de la confianza que todavía cosecha entre grandes sectores de la población).

Mientras tanto, crecen las denuncias y las críticas (que comenzaron siendo ultra minoritaria sy de vanguardia) contra el Consejo que, contradictoriamente, no logra imponer el orden y la estabilidad pero a la vez se erige como una de las pocas garantías que tiene la burguesía (y el imperialismo, interesado clave) para mantener el orden hasta las elecciones (postergadas hasta septiembre -por ahora).

Este es un extracto del último artículo que hicimos sobre Egipto en laverdadobera que va bastante bien las repercusiones de la última movilización:
El momento actual muestra dos aspectos contradictorios del proceso revolucionario en curso. Por un lado, deja al descubierto los límites de las jornadas de enero-febrero que no llegaron a desarticular una institución clave del Estado como son las FFAA que, al contrario, se ubicó al frente de la transición “democrática”. Por el otro, las nuevas manifestaciones y la continuidad de las protestas muestran que el proceso, cuyo punto más alto fue la caída de Mubarak, continúa abierto y las demandas que lo motorizaron siguen más vigentes que nunca, generando una gran inestabilidad en el gobierno de “transición”.

Mientras tanto, en otro lugar lugar de Ciudad Gótica: Los Hermanos Musulmanes ya tienen todas las credenciales de "partido confiable" para el imperialismo, la burguesía y el ejército. Por si alguien tenía dudas, ya se pronunció Estados Unidos y ahora le tocó el turno al CSFA que dijo lapidario: "Los Hermanos no representan una amenaza"... (solo son una amenaza para la independencia política de los trabajadores, la juventud y el pueblo pobre de Egipto).

1 comentario:

Monica dijo...

estoy parando en uno de los departamentos en Recoleta por trabajo y luego me voy a egypto, es bueno saber esto, estas noticias van a ser mejor mi viaje